El Instituto Cultural bonaerense culminó el proceso de restitución con la entrega de los restos pertenecientes a la Organización Territorial «Huarpe Pinkanta” que agrupa a 14 comunidades indígenas de la provincia de San Juan. La ceremonia se realizó el jueves 23 de mayo en Las Chacras de Marayanes, comunidad rural Caucete, a 160 kilómetros de la capital sanjuanina. Luego de ser recibidos por las comunidades, fueron enterrados en un sitio sagrado donde se encuentran otros ancestros y caciques referentes.
El inicio de la restitución de los restos tuvo lugar en Luján el pasado 3 de abril y fue encabezada por el Gobernador Axel Kicillof. En esa ocasión, la titular del Instituto Cultural, Florencia Saintout.
Vale destacar que los restos fueron hallados hace más de 20 años en el Complejo Museográfico “Enrique Udaondo” de Luján, por investigadores que llevaban adelante un proyecto de Extensión de la Comisión de Investigaciones Científicas radicado en la Universidad Nacional de Luján.
El proceso de identificación y restitución
Entre 1997 y 1999, investigadores realizaron un informe sobre la existencia de restos humanos pertenecientes a pueblos originarios en la Colección Gnecco del Museo Udaondo. Fue en el marco de un Proyecto de Extensión de la Comisión de Investigaciones Científicas (CIC) radicado en la Universidad Nacional de Luján. Los trabajos estaban a cargo de los doctores Carlos Cansanello (director), Alicia Tapia y Mariano Ramos (Arqueología).
La Colección Gnecco fue adquirida en 1944 e incluía restos de diferentes sitios y regiones de San Juan, que posteriormente fueron exhibidos. En lo que respecta a restos humanos, se compone de un conjunto de elementos óseos disociados, especialmente integrados por cráneos, por restos humanos individuales conservados por momificación natural y restos culturales asociados a los entierros.
En el 2008, antropólogos y arqueólogos de un proyecto oficial de la UNLu toman contacto con la Comunidad Qom de San Pedro para anoticiarlos de la situación.
En el 2012, se realizan reuniones con pueblos originarios en El Antigal (Primer Centro de Interpretación Indígena de la Argentina) y en el Honorable Concejo Deliberante de San Pedro. Se obtiene el consentimiento de las comunidades originarias para realizar el estudio y proceder a la identificación de los restos.
En ese mismo año, se realiza el estudio necesario y la toma de muestras por parte de los especialistas. Se entrega un Informe -redactado por el antropólogo Mariano Ramos- a las autoridades del Museo con “la identificación precisa de carácter étnico de los restos esqueletarios”.
El grupo de profesionales estuvo coordinado, en la parte de Bioantropología, por la Dra. Silvia Cornero, con la colaboración de Lucía Rangone y Carolina Bruno (Universidad Nacional de Rosario) y Sandra Alanís, estudiante de Antropología de la Universidad de Buenos Aires y miembro del PROARHEP, de la Universidad Nacional de Luján (UNLu). La toma de muestras de ADN antiguo fue hecha por la Lic. Cristina Dejean. El estudio de los tejidos de telares estuvo a cargo de la Lic. Cristina Suárez del Museo de La Plata.